nº 165 • Abril - Mayo 2015

Espacioluke

Txus Velasco

Pensabruptos

108 | Todo Humanismo es pesimista o deviene amable filosofía de consumo. Los humanistas somos la tribu más peligrosa porque conocemos de antemano la verdad y no perdemos el tiempo en discusiones. El humanista de raza ni propugna ni replica. Sigue leyendo la vida como un libro que jamás terminará.

134 | El triángulo contiene tres vértices: el artista, el mundo y el público. El cateto que va desde el artista hasta el mundo tiene como punto medio la mirada. El cateto que va del artista al público sitúa en su punto medio la obra. La hipotenusa sólo se traza si el público, tras sentir la obra, es capaz de ver el mundo como lo mira el artista. El arte verdadero proyecta hipotenusas. El arte falso no lo hace. Y deja, por tanto, inacabado el triángulo.

48 | Las viejas, milenarias metáforas. La vida como río, la existencia como camino. Los arcaicos símbolos que alimentan nuestro ADN cultural. La ciudad como huevo del orden y el campo como guarida de los instintos. O la ciudad como la sentina de toda inmoralidad y el campo como morada de la paz. Las viejas, primordiales metáforas. Intangibles. Delicadas. Familiares.

31| Combatir el adocenamiento. Aquello se me quedó grabado en más neuronas de la cuenta. El conformismo no era mi divisa ni en los años escolares, cuando despuntaba como un hombre de cabeza tocada. Que no fuéramos iguales al resto. Que fuéramos distintos. Sobre todo nosotros. Hoy me sigo preguntando en qué canción lo escuché. O en qué emisora. Todo menos chabacanería.