nº 165 • Abril - Mayo 2015

Espacioluke

David Marín-Hincapié

Poemas del libro 'Remanencia'

X

Aún no han despertado los cuerpos y ya la luz es un oleaje entre árboles y sombras en ascensión. Resplandecen los rostros. Allí están ardiendo en la vigilia y la memoria zumba hasta el fondo de los labios. Vienen de una escena abierta en lo más alto del jardín, justo en la galería de las simulaciones. Atmósferas delirantes todavía tiembla en las manos.

Homenaje a Luis Caballero

XIV

Entre los brazos se recogen y un rumor de hojas sin fin los arrastra. Ya están aquí las mareas de los signos húmedos y frescos. Nombran el peso de una boca y la duración en la que han sucedido los desgarros. Nombran las heridas por donde el deseo aventuró la desobediencia. Nombran las dos caras de un solo enigma y anuncian la perfección del silencio. Duermen los cuerpos. No se sabe aún si despertarán para el anhelo o el desdén.

IX

Nombrar este abrazo es cargarlo de aromas innecesarios. Pueden justificar el transcurrir de las horas y recoger el calor en sus vientres y alentar un sabor dulce en los dedos. Son ya animales ínfimos en la mansedumbre y han visto desaparecer un ciervo herido en el interior del bosque. Las palabras han penetrado como sombras extraviadas. El temor acrecienta esta docilidad. Ahora el fulgor de dos cuerpos reposa como estampas vagas en la noche.

XIV

Ante la ausencia y el olvido inminente la libertad es otra dádiva de la destrucción, como la luz y el perfume de un árbol simplificado.


david robledo
david robledo

© dibujo, David Robledo Arcila (Colombia – 1985)
Músico de la Universidad EAFIT y artista plástico del Taller de Artes de Medellín dirigido por Samuel Vásquez.


davidmartin

David Marín-Hincapié (Colombia - 1990) Escritor y profesor universitario. Realizó estudios de literatura en la Universidad de Antioquia. Ha publicado los libros Abro la noche (2011, Beca de Creación Alcaldía de Medellín - Fundación Arte y Ciencia) y Remanencia (2014, Corazón Negro Editores). Actualmente se desempeña como docente de la Red de Escritores Ciudad de Medellín y realiza estudios de Arte en el Taller de Artes dirigido por Samuel Vásquez.

Poética

Todo escritor confiere cuerpo a sus obras con palabras y silencios. Las palabras son su materia prima, como lo es la piedra para nuestros escultores precolombinos y el silencio es su prueba de fuego. De todas las palabras que puede registrar un diccionario, para el artista, en sentido abarcador, no hay otra palabra más alta que la palabra libertad. Y esta altura que supone no tiene que ver con algo inalcanzable o algo que está en esferas superiores ya dadas. Esta elevación se relaciona más bien con la capacidad de crear cosas significativas en medio de ese estado de emancipación, pues no basta con alcanzarlo, hay que saber qué hacer con la libertad. Solo así logramos dignificar la importancia de esa palabra y reconocemos la dificultad que nos exige ser sensibles a su liviandad o peso, según los casos particulares. Hemos llegado a ese momento en el que la sociedad alcanzó un grado tal de domesticación que siento temor de la sombra al proyectarse sobre mi amigo. Mi temor es un arma enhiesta. Pensar no solo ha sido la vía a la subversión, también ha sido la soga en la que cuelgan mis traiciones. Felices los que se sustraen a la multiplicación errónea del espejo.