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Luke nº 138 - Abril 2012. ISSN: 1578-8644

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La máscara y el canto XIX. Las fuentes de arena

Emilio Varela Froján

UNA POÉTICA

Es falsa la idea que se tiene del arte y de la poesía como evasiones de la vida por la imaginación. Yo estoy en la cosa contraria: en la invasión de los límites de la realidad y en explicar el mundo. Hay que invadir los límites de lo real (no podemos evadirnos de la realidad y, menos, de la muerte, que es la realidad suprema). Pues la realidad de ahora estaba en el comienzo, y no sabemos más de la muerte. En un principio, cuando lo que había en el mundo era de todos, al despertar a la conciencia, se dieron a un tiempo la luz y el latido. Luego, la torpeza humana empeñada en el pensamiento y la imaginación simbólica, en transformar la palabra en signo, la mirada en gesto, convirtió aquella palabra y mirada primeras en lenguaje y paisaje instrumentales, separó lo que estaba unido en la mente y el corazón. Mi obra intenta restaurar aquel cuerpo único y original anterior a la máscara y al canto, la primera luz y la primera voz ante la naturaleza.

(Fragmento del texto “Discurso de la conciencia. Palabras de un poeta desalmado” elaborado a partir de e-mails y conversaciones mantenidas entre 2004 y 2007 con los poetas y artistas amigos)

Sobre el cuerpo de la palabra
la luz medita la forma del silencio.

(De LA LUZ DE LA CENIZA, 8 de junio de 2003)

Y DIEZ POEMAS*

1

Mirad al hombre de la nariz rota
en su rostro camina la sombra
pues nada es
y el ser nada es un diamante
que juega los ritmos de la luz.

(estatua de Rodin)

2

Frente al mar
la sed de la tierra
y el hambre del cielo.

Y la bandera
advirtiendo de la nada
y el vacío.

(Donostia, 26 de julio de 2002)

3

LA MUERTE

En la nada crezco.
No podéis cortarme,
porque soy flor perversa,
sin perfume
y raíces no visibles.
Sólo inspiro,
por eso me buscáis.
Sabéis que existo
más allá de mi nombre.
Moriréis sin encontrarme,
pues jardineros sois
de vuestra propia muerte.

(Donostia, 5 de septiembre de 2002)

4

En una tierra sin paz,
extrañamente oscura
de fiebres negras,
un sol de paja arde
y cierra los caminos.

(“Campo de trigo con vuelo de cuervos”, de Van Gogh)

5

Tras la explosión del ser:
la no-existencia.
Los restos de todo un yo
desorbitados en su nada.
Y la imposibilidad
de pronunciar su nombre.

(Donostia, 22 de julio de 2002)

6

Para tu ausencia
quieres un nombre;
para ese nombre,
prueba de que existes,
un silencio pronunciado.

(Donostia, 29 de julio de 2002)

7

I
En el instante fugaz
que se abre el infinito,
todo pensamiento
es en lo eterno.

II
Hay que evitar, a toda costa, que las ideas
tropiecen con las formas. Se deben mantener
en su cielo hasta que caigan por su propio peso.

III
Todo pensamiento es infinito.
No en extensión, sino en
vueltas a la órbita de su centro.

(Donostia, julio de 2002)

8

Fragmentos, de qué son nada,
no asiste la memoria al ausente.
No-ser, nadie llama,
olvídate,
y, aún latiendo, recuerda.

(Donostia, 21 de abril de 2002)

9

La luz está en la ausencia que es.

(Donostia, 4 de septiembre de 2002)

y 10

Acabarse como el ascua:
en sí misma,
en su propia luz.

(De Las fuentes de arena,
Iparragirre Saria 2002.
Edit. Bermingham, 2003)

* Poemas del libro Las fuentes de arena, que obtuvo el Premio Iparragirre 2002 y fue publicado en 2003 por Bermingham Edit.

Para leer el libro completo: “FUENTES DE ARENA” POESÍAS DE EMILIO VARELA FROJÁN. Autor: José A. Pizarro.
http://www.slideboom.com/presentations/496910/12-02-10--FUENTES-DE-ARENA

Las fuentes de arena