Luke nº97 Junio 2008

Antología

LAS AFUERAS

por más que se extiendan las ciudades hasta juntarse
unas con otras por más desengaños que el sexo la muerte
o las oposiciones nos deparen quedarán siempre las afueras

la oscuridad de los polígonos industriales la ineficacia
el ministerio de obras públicas por más que se empeñen
colectivos ciudadanos asociaciones de vecinos seguirán

amaneciendo los restos del amor en las afueras

(de LAS AFUERAS)

1972

parís, texas

por qué travis qué hay de esa oscura pregunta
por qué la casa en ruinas por qué él por qué ella
por qué el verano de mil novecientos setenta y uno

qué tuvo que pasar qué clase de química por qué
la huelga en el sector metalúrgico por qué el atasco
por qué llegaron rendidos y aún así se besaron

como si mi vida les fuera en ello

(de LAS AFUERAS)

LOS PETROLEROS

hablas de sexo y veo pasar los petroleros hacia el puerto
los veo posarse sobre una corriente lenta que los lleva
yo me pregunto si cada imagen es la historia de este mundo
o es que este instante es sólo pura coincidencia

(de LAS AFUERAS)

EL POEMA DE JANE

él me enseñó a beber a pasar largas temporadas
en la cama a provocar la ira del vecindario a no sentir
en demasiadas cosas ningun tipo de vergüenza

con él también aprendí los gritos el miedo los fracasos
el olor a colonia de otros cuerpos y una frase:
cualquier forma de amor conlleva desperdicio

después de luis no me supo tan amarga la cerveza

(de LAS AFUERAS)

NÚMERO SEIS

me besa me desnuda hace de mí lo que quiere
estoy borracha todo me da vueltas tengo que ir
al baño dos veces para no vomitarle encima

se marcha temprano a toda prisa no hay despedida
nota justificativa o teléfono de contacto sólo dudas
todos los hombres son príncipes a las cinco de la mañana

todas las putas son tú cuando despiertas y no hay nadie

(de LAS AFUERAS)

SWEET JANE

lou reed

yo he vivido mucho tiempo pendiente de un hilo
telefónico de un buzón sin cerradura de las manos
de unos hombres que no quisieron encontrarme

acumulando toda clase de pastillas esquivando
como pude los domingos por la tarde yo he vivido
demasiado tiempo al otro lado de la pantalla

mirando el amor por los anuncios

(de LAS AFUERAS)

FORD

como un oso que despierta del letargo
nuestro ford va derritiendo la nieve del parabrisas
pongo las maletas en el asiento trasero repaso el mapa de carreteras

ahora llegas tú medio dormida
sin pintar sin arreglar rota por la noche pasada
una noche de preguntas de miedo de ropa que entra

y sale de los armarios una noche de nevera desconectada
pero hoy es distinto y te sientas a mi lado como antes cuando viajábamos sin prisa
a través de bosques y maizales en esas noches
de faros encendidos en busca del océano

el ford asciende lento por la colina
quiero viajar al sur al sur de todos los proyectos

(de EL MAPA DE AMÉRICA)

FALDA

como un tornado que pasara lentamente
la vida esparció los objetos por las cuatro
esquinas de este mapa objetos

de escaso valor souvenirs bolígrafos gastados
transistores sin pilas y prendas prendas como esa falda

tirada por el suelo
recuerdo el día que la compraste ¿qué es esto? no
no voy a ponérmela es demasiado corta cien mil veces

en cócteles en verbenas en domingos estúpidos en casa
bailando para ti sólo para ti cien mil veces me la puse
sin bragas sin nada debajo como tú me pedías y ahora ves

tirada por el suelo
se la pone luisa para jugar con las amigas

(de EL MAPA DE AMÉRICA)

TRES SOLTEROS Y UNA PEQUEÑA DAMA

ninguno de los tres era ted danson
ninguno era arquitecto piloto o dibujante
pero uno de ellos encontró una cartera con billetes
marcaron el número de mary y mary apareció a la media hora con un corpiño rojo y unas medias a juego

terminada la fiesta la chica se quedó dormida
el más joven la cubrió con una manta besándole los labios
el más viejo recordó a su hija a la que no veía desde 1984
el tercero observaba en silencio barriendo torpemente los restos de la fiesta

la chica durmió durante horas
en el exterior el tiempo se detuvo

luego unos golpes en la puerta alguien gritando a voces una cifra
y la chica aterrada dónde estoy qué ha pasado quiénes son ustedes
salieron por la puerta trasera del edificio dejaron a mary
en una parada de taxi prometieron volver a verse

algún día
cuando todo hubiese acabado

(de EL MAPA DE AMÉRICA)

GARNER, NC

pongamos que él tiene 30 y ella 17
música de tom jones los dos bailando muy juntos
en el centro de la pista pongamos que se deciden

que ella se entrega en el servicio de caballeros

que pasan tres días y tres noches encerrados
en el hollyday inn baño piscina vistas a la carretera
que él es un maníaco que ella hace cosas delante de una handycam sony de 8 mm. cosas que al principio duelen y luego duelen más

que despierta en la cuneta de la 95
aturdida por el efecto de los somníferos casi desnuda
como los hijos de la mar

y que espera el autobús en algún punto del mapa después de caminar toda la noche con los zapatos blancos en la mano fogueada por los faros de todos los camioneros

(de EL MAPA DE AMÉRICA)

CONSTRUCCIONES LUQUE

Habíamos terminado la obra y hacíamos cola en la caseta. Íbamos cobrando según lo convenido, ni un céntimo más, tú esperabas noticias pegada al teléfono. Luque llamó para invitarnos a una copa, hay que celebrarlo, y entramos en una de las casas que habíamos construido. Champán, coca por todas partes, putas bailando en la escalera. Rubén hizo amago de marcharse, me tengo que ir, me esperan en casa, pero Luque dijo, si te vas ahora no vuelvas a pedirme trabajo. Todos conocíamos a Luque y sabíamos que iba en serio.

Cuando llegué a casa te encontré durmiendo en el sofá con la tele encendida, los tacones de aguja esperaban vacíos en el dormitorio. Guardé el dinero en el cajón y me fui a la ducha. Luego, ya en la cama, me susurraste al oído, ¿trajiste el dinero?

(de DINERO)

TRAMPAS

Dice que no está, que se fue de viaje. Está nerviosa, me ofrece un café, no gracias, deben mucho dinero y yo he venido a cobrarlo. La hija mayor está viendo dibujos animados, El Rey León, a mi hijo le encanta, se sabe todas las canciones. Los niños aprenden rápido. El pequeño me mira desde la trona con la boca llena de papilla, muy serio, con los ojos azules de su padre. Mi marido es quien lleva las cuentas, dice, yo no sé nada de papeles. Le entrego un documento firmado por los dos, sí, ésta es mi firma, dice, él dijo que no me preocupara, que era bueno para los dos, bueno para los niños, que todo se arreglaría. Él y su negocio de barcas de recreo. Lleva dos meses fuera, le he dejado mensajes al móvil, pero no responde. Los niños preguntan por su padre, dónde está papá, dónde está papá, y yo no sé qué decirles. Todo eso está muy bien, señora, pero ahora hablemos de dinero.

(de DINERO)

PRÓDIGO

¿Has traído el dinero? Escribió la cantidad y mi nombre en el beneficiario, las manos le temblaban al firmar. Pienso devolverlo, dije sin convicción. Mi mujer esperaba en el coche con los niños, las maletas y todas nuestras cosas. ¿Cómo está mi madre?, le pregunté. Nos despedimos dándonos la mano como socios.

Al cobrar el cheque pensé en él, en lo que había trabajado para ganar ese dinero. Las horas extras, los domingos, aquellas reuniones hasta la madrugada. Pero también los viajes, largos viajes a lugares desconocidos, como aquella vez, cuando no volvió en toda la semana. No sabíamos nada de ti, mi madre no ha dejado de llorar, no vuelvas a marcharte de ese modo. Prometió que no volvería a pasar, y cumplió su palabra, pero algo dentro de mi madre se había roto para siempre.

Han pasado dos años desde entonces. Al principio llamábamos cada semana, mi mujer mediaba entre nosotros y los niños hacían su trabajo. Pero un día encontré un mensaje en el buzón de voz: tu madre está mal, nos hace falta el dinero, queremos llevarla a un médico, y ella por detrás, ¡cuelga, cuelga, qué estás haciendo, cuelga ese teléfono! Hace meses que no tengo noticias.

(de DINERO)

SEVILLA ESTE

Es un hombre que camina solo por el barrio. Un martes por la mañana a la hora en que los demás trabajan. Que mira su teléfono móvil comprobando que funciona correctamente, que tiene suficiente batería y cobertura. Que todavía puede controlar la situación. Es un hombre a la espera de noticias, que ha salido de casa porque necesita pensar, pensar en algo. Su mujer lo mira desde el balcón con el niño en brazos, el camisón deja entrever los pechos caídos de la maternidad. Pechos una vez de brillantina, la locura de la sala de fiestas, todos esos hombres y sólo tú, con tu cara de pájaro. Ven aquí, voy a llevarte lejos de este infierno, tengo negocios. El mismo hombre que hoy se arrodilla en el cajero automático y que suplica, perdónanos, Señor, perdónanos.

(de DINERO)

Creación

Pablo García Casado

sonrisa