Luke nº95 Abril 2008

La Balsa, o la disculpa para hablar de Gericault

La Balsa
Antoine Choplin (Traducción de Idoya Etayo y Manuel Prieto)
Editorial Bassarai

Recuerdo que cuando un amigo me recomendó este libro La balsa sus palabras fueron “Cuando te preguntan sobre un libro generalmente te ponen en un brete. Sin embargo La balsa es muy sencillo de poner en situación: es un libro que habla de pintura y de las relaciones humanas, con la guerra como telón de fondo.

Debo reconocer que hay libros que lees en momento adecuado y te llegan, y quizá sea por esa manera de escribir sencilla, con frases cortas, casi siempre en presente y llena de personajes y actitudes reconocibles en la vida normal que La balsa me hizo interesarme por la historia, y sobre todo por el cuadro principal La balsa de la Medusa, y por otros cuadros que se comentan a través del libro.

No soy ningún experto en pintura y sin embargo, como consumidor de cultura, este libro ha cambiado mi manera de acercarme al arte y en especial a la pintura y a la figura del artista. Y por supuesto a la obra del gran Gericault

La balsa representa un verdadero momento de placer tanto para los apasionados por la pintura, como para los más escépticos en la materia, en la medida en que la esencia misma del Arte es puesta por delante de todo lo demás. La balsa nos lleva a través de sus páginas, pero cada vez más según avanzamos en su lectura, a la inevitable reflexión de que el hombre necesita que exista el Arte, aunque muchas veces ni siquiera entienda por qué. Y para muestra nos ofrece un botón, haciéndonos reflexionar a los profanos sobre para qué necesitamos la propia obra maestra de Gericault, Le Radeau de la Meduse.

Choplin al comparar la vida y las imágenes se sirve de una historia de amor entre un hombre y una mujer para hacer de su obra una égloga de los grandes maestros de la pintura.

Literatura

J. Óscar Tomé

La balsa

La balsa representa un verdadero momento de placer tanto para los apasionados por la pintura, como para los más escépticos en la materia, en la medida en que la esencia misma del Arte es puesta por delante de todo lo demás (...)