nº 46 - Enero 2004 • ISSN: 1578-8644
"Jexuxmai Lopetegi : LAUA "
pako aristi / kepa murua
La música de Jexuxmai Lopetegi se descubre como cuando miramos a los ojos de alguien sin saber qué pasa. Con tiempo esa mirada cambia, pero con su nuevo trabajo el cantante de Zarauz vuelve a un paisaje sonoro donde las palabras tienen sentido. En un susurro aparecen como en la canción que da título al disco, Laua, y con el rasgueo de guitarras se alzan en Bizi Poza (Ganas de vivir), una evidente declaración de intenciones. Otras ecos del folk como en Harritxintxar nos acercan al hombre que mira a su interior.

En la música el sentimiento descubre la vida.
Kafka pasean (Kafka paseando) habla de Lopetegi, un poeta con su guitarra a cuestas, buscando respuestas en sus letras y canciones desde una madurez que nos hace ver las cosas con calma. Porque con calma se hizo este disco transparente que se mueve como el mar, a veces con susurros y otras a golpes, a embestidas, con fraseos contundentes y armonías eficaces.

En
Zarautzen (En Zarauz) reconocemos al músico por sus calles con las contradicciones que coloca la existencia a su paso. Y en Kontraesanak (Contradicciones) al hombre frente a su condición de artista. Si la letra plasma un mundo cargado de dudas, la música refleja una ambientación pesimista, pero a todas luces acertada, porque se abre al corazón con la fuerza de la música. Ihesa zilegi balitz (Si fuera lícito huir) en cambio es un poema existencial con un fraseo cadencioso que amplía su ritmo con Nonnahi (En cualquier lugar), pieza que habla del amor por lo que nos rodea sin saber grandes cosas de él, como cuando se escucha una canción que no sabemos qué quiere decir, pero gusta.

El paisaje, el amor, la vida son las claves para entender el camino de Lopetegi. En Gogoetak, la tristeza que brilla en los ojos, como quien oculta la hondura de su pensamiento, aparece en una música que suena a blues con la compañía de una guitarra o un pequeño coro. Con
Kristalaren mugan (En el límite del cristal) el cantante se coloca en el límite con un fondo de alegría contenida como si se lanzara a un mundo reconocible, pero a la par desconocido. Sucede cuando tenemos algo muy dentro, un modo de ver la vida, pero que sorprende por igual. Es lo que pasa con el mar, que parece igual, pero que nunca es así. Siempre distinto.

Y en esa distinción surge
Uhinen duintasuna (El fragor de las olas), un rumor constante de buena música en un mundo donde la mirada cambia sin darnos cuenta, sin prisa, con gusto, tal como se concibió este personal disco que exige sólo escuchar y mirar, porque todos tenemos un mar a la espera y un fondo de sueños por compartir desde que la música y la poesía se juntaron para explicar a su manera el mundo.

(Kepa murua)

El disco LAUA de Jexuxmai Lopetegi es su trabajo más redondo y acabado, el más profundo y el más dulce. Las letras de las canciones se acoplan a la perfección a la música del zarauztarra, quien ha logrado un perfecto equilibrio en esta nueva grabación realizada con calma y sin prisas.

Gracias a su personal voz que con la experiencia de los años se transmite con claridad, el mundo que se describe en las diferentes canciones destaca por su riqueza armónica y expresiva. El cantante tiene el poderío del rockero, pero en este disco se aprecia la experiencia del artista que modula con sabiduría los registros de su voz, a los que acompaña con arreglos y armonizaciones logradas que en cada canción transmiten cierta melancolía que registra el paso del tiempo.

Trabajo musical profundo e intimista. Una música que tiene un hueco en la cultura musical del País Vasco y que sin duda sorprenderá por su delicadeza y belleza a aquellos que se acerquen al disco LAUA desde cualquier parte del mundo.

Jexuxmai Lopetegiren ´Laua´ diskoa bere lan guztien artean borobilena da, sakonena, gozagarriena. Letren mailak bat egiten du musikaren maila altuarekin, eta bien arteko oreka ondo konpontzea lortu du musikari zarauztarrak, patxadaz eta inongo presarik gabe egindako grabazioan.

Bere ahots indartsua ondo modulatzen ikasi du, inoiz baino gozoago entzuten da. Kanten ibilbide armonikoa aberatsa eta sakona da. Rokeroaren iragana dauka Lopek bere atzean, baina oraingo honetan denboraren iragana gehiago antzematen da bere kantukeran, nolabaiteko malenkonia batek leundu eta ondu egin du haren kantatzeko modua, kantuen arregloak, armonizazioak eta dena, giro berezi bat lortuz kantu bakoitzean.

Lan sendoa da, sakona; Euskal Herrian egiten den musikaren baitan ohorezko leku bat merezi duen lana, dudarik gabe.

(Pako Aristi)