ISSN 1578-8644 | nº 41 - Julio / Agosto 2003 | Contacto | Ultimo Luke
Mirando hacia otra parte
"Eudaimonía fisiké ( o la alegría del esfuerzo físico) "
vicente huici
Habituad@s como estamos a utilizar fundamentalmente el cerebro y , si acaso, su prolongación en una limitada actividad de las manos o de los pies, la inmersión plena en un esfuerzo físico de todo el cuerpo puede suponer una experiencia sorprendente, a poco que nos detengamos en ella.

En efecto, ya sea intencionada tal inmersión – como el mover unos muebles o salir a andar en bici con los amigos - o bien , inesperada – así, huir corriendo ante un peligro - , su simple consecución viene a despertar un sinnúmero de nuevas sensaciones entre las que predomina una cierta alegría a la que se suma un leve cansancio.

Los médicos y biólogos saben que lo único que ha ocurrido en estas ocasiones es que hemos sido inundad@s de endorfinas, pero, como en tantos otros aspectos de la vida, el conocimiento técnico o científico tan sólo se superpone a las propias sensaciones.

Unas sensaciones que ya fueron excelentemente descritas por Peter Handke en una obra tan original como insólita, el Ensayo sobre el cansancio . Afirma en ella el escritor austriaco que “ el cansancio abre, le hace a uno poroso, crea una permeabilidad para la epopeya de todos los seres vivos”, es decir, que recuerda nuestra condición de seres corporales, algo, por lo general, tan olvidado, terciados , como estamos, por un judeo-cristianismo latente que , sin distinción de izquierdas o derechas, abomina del cuerpo convirtiéndolo en mero receptáculo - ¡ siempre pecaminoso! – de una supuesta alma. De aquí , quizá, nuestra extraña alegría, por encima y por debajo de las ideologías.

Así, y exceptuando una actividad física extenuante y esclavizada - no podemos olvidar a los trabajadores de la construcción o a los temporeros del campo - , la renuncia deliberada al esfuerzo físico, que en épocas anteriores fue signo de civilización y hasta de jerarquía social - basta recordar la resistencia al trabajo manual de todas las aristocracias civiles y militares de la que se hizo eco en nuestros lares Ilía Erenburgh - puede ahora ser considerada como regresiva y hasta estúpida, ya que nos priva de una de las fuentes de la alegría: la alegría del esfuerzo físico. Eudaimonía fisiké.