Sección: MUSICA
Serie: ---
Título:
La extraña música que nos rodea a diario, o como el Rock y el Pop dejaron de ser música popular
Autor: Roberto Gutiérrez
e-mail: maitanegm@eresmas.com

nº 33 - Noviembre

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MUSICA POP

La música pop era la música menos agresiva de la música moderna y durante la década de los sesenta, setenta y ochenta se alimentaba de matices soul, disco, rock melódico y estricto pop, para configurar una serie de artistas que iban desde los Seachers a Abba, desde los propios Beatles a Madona, desde Boney M a Soft Cell, desde Romantics a Culture Club. Todo esta música ya sea en su faceta disco - music, tecno - pop o estricto pop juvenil creaba una música festiva que servía para bailar y disfrutar, siendo en algunos casos bastante hortera y en otros de enorme sensibilidad y belleza, siendo su mayor y mejor ejemplo de esto último, el grupo The Beatles. Toda esta música pop y popular pertenecía a las masas y se mezclaba perfectamente con el Rock, perteneciendo al universo formado por el Rock and Roll, estilo aglutinador de todas las referencias musicales de la música moderna. En definitiva era una música que mamaba del rock, aunque en la mayoría de los casos se le tachaba de blanda y comercial, en detrimento de la agresividad y virtuosismo musical que generaba el ROCK con mayúsculas.

Hasta casi finales de los ochenta el Rock y el Pop eran Música Popular y pertenecían a las masas pero curiosamente las masas abandonaron estas músicas y se trasladaron a otros conceptos musicales muy alejados de las propuestas anteriores.

LA MUSICA QUE NOS RODEA HOY EN DIA

Todo empezó con el acid. A mediados de los ochenta empiezan a aparecer personajes con unas chapitas amarillas con una cara sonriente y que se alejan en sus gustos de todo lo que venga del pop y del rock. Su origen inmediato es el tecno pop pero abandonan pronto el significado pop del término para centrarse en el tecno.

La música tecnológica y de ordenadores empezó a tomar las pistas de baile hasta que desapareció la melodía. Los grupos desaparecieron y ya no había músicos sino DJ´S. Los ritmos eran atosigantes y repetitivos, rechazándose todos los instrumentos convencionales. En las discotecas desaparece la música pop y su derivación disco - music, para centrarse todo en el acid - house y la música máquina. Se deja de oír a Abba, a los Bee Gees, a Boney M, a Blondie o a Madonna y por supuesto el Rock desaparece por completo, para programar durante horas ritmos sincopados e hirientes donde solo destaca el ritmo en el que cuanto más altas son las bases de percusión electrónica mejor.

Este fenómeno pasó posteriormente a los bares y pubs nocturnos y la gente dejó de escuchar música para centrarse en estar acompañados de un ritmo anfetamínico que empezó a hacer las delicias de los adolescentes que lo único que hacían era bailar durante diez horas, bebiendo agua y tomando anfetaminas, convirtiéndose todo lo expuesto en un espectáculo de babuinos en el zoo.

La noche no daba para mas y los ritmos tampoco y la gente en los noventa ya empezó a cansarse un poco de tanta máquina y empezó a exigir más melodía y de repente apareció una música que era más musical en el estricto sentido de la palabra, pero igualmente alejada del Rock y del Pop, me estoy refiriendo a la música latina. En esta música por lo menos hay gente que toca y canta pero la verdad es que ¡cómo tocan ! y ¡cómo cantan !. Dos de los fenómenos más populares han sido Raul en España y Ricky Martin a nivel internacional. Posteriormente se vuelve a hacer popular la salsa y ya está otra vez la música en la calle, ahora todo latino y bien edulcorado. La gente se dedica a aprender bachata, salsa, merengue y demás derivaciones de lo latino para bailar, ahora con algo más de estilo que antes, aunque sin preocuparse de lo que realmente estaban oyendo y sin saber si les gustaba o no, en la mayoría de los casos, ya que lo que verdaderamente les gustaba era bailar.

Finalmente con tanto ritmo ya no se sabía que hacer y deciden poner melodía a la vida de los jóvenes para llegar al triunfo de la música melódica. Este fenómeno nunca creí que podría ser popular. La música melódica siempre ha estado ahí y siempre ha sido alimento de un público heterogéneo que iba desde las adolescentes hasta las abuelas pasando por las madres pero nunca fue un fenómeno popular y nunca triunfó entre las masas hasta que en el siglo XXI triunfa de forma impresionante lo melódico. La cosa empezó con Alejandro Sanz, heredero de Camilo Sexto o Pablo Abraira e incluso de José Luis Perales para estallar en el año 2001 con “Operación Triunfo”. Ahora se crea una música popular absolutamente melódica. La radio y la televisión están llenos de David Bisbal, Bustamante, Rosa, Chenoa y Tenorio. La música melódica se caracteriza por el triunfo de la melodía sobre cualquier otro matiz, incluso el estrictamente musical. La música deja de ser importante, ya no se oye, sólo se oye la voz, y el ritmo es melódico y tarareable. Todas las canciones son prácticamente iguales, empiezan suaves luego se desgarran y en medio siempre tienen un estribillo que se tararea.

EL FUTURO

Me han dicho que lo nuevo que se avecina es el Rock y el Pop en el sentido tradicional y que en las portadas de revistas aparecen Beck, Ray Adams y The Strokes, de los nuevos y Bruce Springsteen y los Rolling Stones, de los viejos ; y que esto va a ser lo más moderno del momento.

Considero que después de quince años sometidos al underground, es necesario que se acabe la racha y vuelva a ser la música Rock y Pop música popular, olvidándonos de los otros fenómenos que lo siento pero no puede adjetivarlos como fenómenos musicales sino como fenómenos únicamente.