Sección: LITERATURA
Serie: Creación
Título:
Tres Poemas
Autor: Luis Miguel García de Amézaga
e-mail: creacion@espacioluke.com

nº 26 - Marzo

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Tres poemas del poemario “BARRUNTOS”

Sin Respuesta

¿Qué avizora la serpiente desde el polvo,
y el topo desde el intestino grueso de la tierra?
¿Qué otea el águila en su volar por encima de las nubes?
¿Verá el periquito codificados los árboles
por entre las rejas de su jaula?
¿Tendrá visión de príncipes concéntricos
el sapo en la charca?

Cuentos, fábulas, parábolas, mística, poesía.
Prozac, éxtasis, anfetas, diseños de plástico.
Valium, sueños, hipnosis, tu abuelito
te puso la mano entre las piernas cuando eras mancebo.
Todo en un mismo saco de donde extraer los regalos.
¿Qué desea ver el famélico niño
a través de las moscas cojoneras?

¿Qué suspira contemplar el vendedor de cupones
aparte de las variedades de lo oscuro?
La niña sobre los hombros de su padre,
salvando la multitud, ¿divisa la ilusión?
El feto en su nido acolchado
se mueve porque anhela ver mundo,
¿o porque quiere reconocerse en su espejo?

¿Qué espera encontrar el espermatozoide
en su frenético nadar contracorriente?
El loco pretende estar cuerdo,
y el cuerdo, un algo de loco.
Por qué nos empecinamos en cultivar la estulticia,
y creemos en una fe empalagosa?

OTRA INFANCIA

Pegado al periscopio de la puerta
como lengua al hielo,
algo inclinado
soportando la penumbra en los hombros,
veo porque veo, directamente penetrarme
una ráfaga de luz desde la axila.
Luz mosquitera
nacida en la sórdida escalera
de construcción antigua, sin ascensor,
con escalones de granito y traidores recodos.
Me fijo en el descastado pasamanos
temiendo la aparición de los nudillos.
Atenazado en el palco de la mirilla
apenas respiro, laten las sienes.

Retumban las pisadas etílicas,
las risotadas incongruentes.
Se tambalea esa mata incontrolada de hombre.
Lo veo porque veo, aunque no quiero ver
ojos inyectados,
papada grasienta con rojas islas
apuntando hacia la cerradura.
Corro y me escondo
bajo un seguro de sábanas y mantas.

¿Tocarán hoy las babazas y la llorera aceitosa
o los golpes, gritos y violencia gratuita?
¿Cómo prever el carácter sin carácter de un alcohólico?

Aprieto los dientes,
emito mugidos para no escuchar,
me araño los brazos para sufrir por fuera.
Me fuerzo a dormir
y rezo para no despertar.
La vergüenza vence al miedo
en la noche inacabable
donde los dioses no me permiten huir.

Es de mañana y me levanto
invitado por el silencio.
Estoy solo,
soy un niño muy mayor para mi edad.
Abro el frigorífico
y con la misma lo cierro.
Sólo hay frío envuelto en celofán.

HOGAREÑO

Ahorcado con un pellizco en el cuello
pendo del tenderete de patio trasero.
Chispea, el agua sacude
las bragas navegantes, los juncos de colada.

Chorreo el sudor de nubes maratonianas.
Soy trapo empapado, trapo trapero
que se balancea
en un fatalismo de cuerda horizontalmente dispuesta.

Gira la tierra a su lado mocho,
duermen las hierbas en sus ataúdes parduscos.
Gimo temblores de hilo
amenazado por el bramido de gotas invisibles.
Rezo despacio, deletreando…

Hoy el encargado olvidó colocar las estrellas
como fondo de pantalla,
y apenas distingo el firmamento de mi tela.
Qué cansancio con la suciedad impregnada.
Qué recuerdos de montaña rusa
en el tambor de la lavadora.
Ahora agonizo, preámbulo de mortaja.

La ventana se ofusca en la cerrazón.
La calidez hogareño arrulla al amante y a los niños.
Me posterga como trapo de cocina,
limpia grasas de cacerola.

Víctima de homicida pinza
respiro suspiros
y cito al anónimo que estuvo antes de mí,
que se pasea por las sombras con chubasquero de plata,
que me guardará en su memoria
cuando la helada pase factura
con rigidez de estaca.

Luis Miguel García de Amézaga
Nacido en 1966 en la ciudad de Vitoria en la cual vive actualmente. Fue durante años visitador habitual en distintas facultades universitarias con el único resultado de un título de Magisterio que nunca ha utilizado. Ha trabajado en diversas faenas de pico, pala, y pluma. Actualmente sobrevive de su tarea de asesor bursátil. Escribe desde los veinte años, y lee desde que la razón le permite recordar. Por ello se considera un escritor aficionado y un lector profesional.

Cuenta con varias participaciones en antologías poéticas y de relatos con la editorial Jamais de Sevilla. También colabora con revistas literarias en papel como “Nitecuento” , “Celador” “Amilamia”. En México colabora con la publicación de actualidad literaria “Los Papeles de la Manscupia” Desde hace unos años cuelga trabajos poéticos en distintas revistas virtuales y páginas especializadas en poesía. También colabora con la asociación editorial de Alcorcón “Verbo Azul”. En el año 2001, ha publicado el poemario: EL CAOS DE LA IMPRESIÓN con la editorial madrileña independiente: SINMAR.